La cama hospitalaria eléctrica con respaldo ajustable es una característica fundamental que proporciona importantes beneficios terapéuticos y de confort para los pacientes. El respaldo accionado eléctricamente permite una transición suave y sin esfuerzo desde una posición completamente plana hasta una posición sentada vertical (posición de Fowler) y cualquier ángulo intermedio. Esta funcionalidad es clínicamente esencial para mejorar la expansión pulmonar y la oxigenación, reduciendo así el riesgo de complicaciones respiratorias como la neumonía, especialmente en pacientes postoperatorios o gravemente enfermos. Mejora considerablemente el confort del paciente durante actividades diarias como comer, leer e interactuar socialmente, lo que eleva la moral y apoya el bienestar mental. Desde la perspectiva del cuidador, facilita un acceso más fácil al paciente para exámenes y cuidados personales. El ajuste se controla normalmente mediante un mando a distancia, lo que lo hace accesible incluso para pacientes con fuerza limitada. Esta característica, que a menudo se integra con funciones ajustables de rodillas y altura, es un pilar fundamental de la atención moderna al paciente, permitiendo una posición personalizada que favorece la recuperación, promueve la independencia y mejora la experiencia general del paciente en entornos que van desde cuidados intensivos y salas generales hasta centros de rehabilitación y atención domiciliaria.