El confort del cuidado de los ancianos se incrementa con el uso de camas ajustables ergonómicas, ya que su diseño permite características de confort y ajuste. Su construcción implica el uso de materiales como el acero o la aleación, lo que les ayuda a resistir un uso constante y peso. El soporte y la ayuda para los geriátricos se proporcionan adecuadamente mediante los cambios ajustables en los soportes lumbar y de las piernas, así como alteraciones en la altura. Además de ayudar al usuario durante el proceso de entrar y salir de la cama, la cama fomenta al usuario durante las comidas, lo cual ayuda en el apoyo psicosocial y el voluntariado. La calidad de vida se mejora junto con las actividades diarias, lo que ayuda a que estas camas fomenten la independencia ofreciendo el cuidado de soporte adecuado. Las camas cumplen con diferentes culturas y ayudan al usuario a relajarse, dormir y moverse con facilidad.